Andreu Ródenas
Montezuma es una pequeña población situada en la parte sur de la Península de Nicoya en Costa Rica.
Fuera de los circuitos turísticos más habituales yo diría que es un lugar imprescindible de visitar para todos aquellos que elijan Costa Rica como lugar para pasar unas vacaciones o hacer una ruta de viaje.
El océano pacífico baña sus playas de manera tranquila, al contrario de lo que ocurre en las poblaciones vecinas de Malpais y Santa Teresa donde las olas con las que el mar rompe cerca de la costa atraen a los surfistas.
Montezuma es muy pequeño, de hecho el núcleo principal no tiene más de dos pequeñas calles en los que se concentran en hilera todos los servicios: hoteles, restaurantes, tiendas y agencias de turismo local.
En la época seca el calor es fuerte y las temperaturas altas tanto de día como de noche y en época de lluvias estas suelen ser abundantes.
Montezuma es de aquellos lugares que sin dejar de recibir turistas durante todo el año, permanecen vírgenes al turismo de masas y se le puede considerar como un lugar donde relajarse es una tarea fácil de realizar.
Para llegar a Montezuma la forma más rápida y fácil es mediante el ferry que sale de la ciudad de Puntarenas hasta Paquera ya en la península de Nicoya, y desde allí continuar por carretera, en bus o en el coche que previamente se haya alquilado.
Aparte de las playas de Montezuma cerca se encuentra la primera area natural especialmente protegida que hubo en Costa Rica, se trata de la Reserva Natural de Cabo Blanco justo en el extremo de la península y que separa la población de Montezuma de Malpais, Playa Carmen, Santa Teresa y otras playas.
También se puede visitar en una excursión de mediodía la Isla Tortuga que está situada justo en la entrada del Golfo de Nicoya, es una isla deshabitada en la que los agentes turísticos locales llevan a los visitantes a hacer snorkell y disfrutar de playas de arena blanca.
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