Al norte de la capital HANOI y a unas 6 horas por carretera se encuentra ubicado entre altas montañas el Parque Nacional BA BE.
RIU NANG
EN LA BARCA CREUANT EL LLAC BA BE
El parque tiene 10.048 ha. y se el hogar de 1.268 especies de fauna y flora, fue creado en 1992 con el objetivo de presevar los ecosistemas boscosos de esta zona del noreste de Vietnam. La joya del parque es sin duda el lago Ba Be de 450 ha. Este es el único lago del mundo en una zona karstica.
Dentro del parque y siempre a la orilla del lago o del río Nang hay varios poblados de la etnia Tay como son: BAN CAM HA, BO LU y PAC NGOI que es en el que nosotros nos hospedamos. Lo hicimos en una de las casas sobre pilares que acogen visitantes. Estas casas son como una especie de refugios de montaña con diferentes habitaciones para compartir camas y lavabos. Los propietarios viven en el piso de abajo y a la hora de preparar las comidas agradecen la ayuda y colaboración de los visitantes.
BO LU
CASES SOBRE PILARS A PAC NGOI VILLAGE
PAC NGOI VILLAGE
Lejos de querer abandonar este lugar tan lejano y solitario, los habitantes están haciendo un esfuerzo con la ayuda del gobierno vietnamita para arreglar y / o construir casas nuevas y así ayudar a conservar la cultura, costumbres y tradiciones de la etnia Tay.
BAN CAM HA
Una visita al parque nacional obliga a pasar allí dos noches, pues no es fácil llegar a él y se necesita un día entero para navegar por el lago y por el río parando a caminar entre los pueblos, además de visitar la cueva Puong y las cataratas Dau Dang.
COVA PUONG
PART FINAL DE LES CATARATES DAU DANG
COVA PUONG
La cueva Puong tiene más de 30m de altura y el río Nang la cruza, los visitantes pueden bajar de la barca y recorrer los más de 300 metros de camino que hay dando un paseo para observar diferentes formaciones. Dentro de la cueva hay muchas colonias de murciélagos pertenecientes a unas 18 especies diferentes. A unos 4 kms del lago Ba Be el río Nang tiene un desnivel importante y se producen unas cataratas a lo largo de un tramo de río de unos 500m.
Estos dos días nos permitieron conocer un poco las costumbres y la gastronomía de la gente de la etnia Tay y compartir con ellos momentos muy entrañables como cuando Andrés y Mireia estuvieron jugando al voleibol con ellos, o cuando paseando de noche entramos en alguna de las casas donde familias y amigos nos invitaron a cantar con ellos en sus Karaokes.
Os dejo una galeria de imagenes:
