Andreu Ródenas
En nuestro viaje por la provincia de Québec hicimos una visita de medio día en el Cañón Santa Ana.
Cuando se deja la ciudad de Québec para ir en dirección noroeste hacia la región de Charlevoix a una media hora o tres cuartos de hora hay un paraje espectacular que merece la pena visitar, se trata de un cañón natural por el que se puede pasear cruzando 3 puentes colgantes y disfrutar de unas vistas perfectas de la fuerza del agua cuando queda atrapada entre paredes de roca. Se pueden hacer diferentes actividades como por ejemplo tirolinas o puentes tibetanos, pero tan sólo haciendo el circuito a pie cumplido ya los cuales es suficiente.
Antes de llegar al cañón Santa Ana hicimos una parada en las cataratas Montmorency justo a la salida de la ciudad de Québec, son más altas que las del Niagara pero más reducidas en cuanto a anchura y ciertamente menos espectaculares pero si se hace la ruta del noroeste de la provincia merece la pena detenerse y hacer un paseo. Normalmente durante el invierno quedan completamente heladas y los más aventureros se dedican a escalarlas.
El Cañón Santa Ana está explotado por una empresa privada ya que no es de titularidad pública, hay varios miradores a lo largo del recorrido y el sendero por el que se va haciendo el recorrido cruza de lado a lado gracias a varios puentes suspendidos o colgantes. La catarata más espectacular tiene más de 70 metros de altura y la fuerza del agua en todo el cañón se puede apreciar gracias al ruido y a la espuma que se crea.
Este lugar lo encontrará siguiendo la ruta de la carretera 138 (la llamada «chemin du roi» en su parte sur antes de llegar a Québec, ver mi post «el chemin du roi») una vez pasado el pueblo de Sainte Anne de Beaupré donde podrá también hacer una parada para visitar la gran y bonita catedral de Sainte Anne.
Os dejo el link de la página web: http://www.canyonsa.qc.ca/canyon-waterfall-attraction-quebec.html
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